Comunicado.
El senador por Chiapas
Zoé Robledo propuso aplicar la “muerte civil” a aquellos servidores públicos o
particulares que hayan sido condenados por delitos de corrupción y que
reincidan, a fin de que no puedan volver a participar en la vida pública para
efectos jurídicos.
A través de una
iniciativa, el legislador chiapaneco señaló que la ineficacia, opacidad y
deshonestidad lacera y perjudica los intereses de la sociedad en su conjunto y
abre la puerta a la corrupción que es un cáncer que corroe la credibilidad
ciudadana en las instituciones.
“En México la
corrupción y la impunidad parecen ya algo normal en nuestra vida cotidiana”,
lamentó.
En este sentido, el
legislador chiapaneco explicó que su iniciativa pretende complementar los
supuestos de sanción contenidos en el Título Décimo “Delitos por hechos de
corrupción” del Libro Segundo del Código Penal Federal en lo que refiere a
reincidencias por delitos relacionados con hechos de corrupción.
“Se aplicará la
‘muerte civil’ a aquellos servidores públicos o particulares que hayan sido
condenados por delitos de corrupción y que reincidan”, indicó.
Zoé Robledo explicó que
el concepto de “muerte civil” fue utilizado en el Derecho de la antigua Roma,
para calificar una pena que al imponerse a una persona, esta dejaba de estar
viva para todos los efectos jurídicos.
En la propuesta del
senador chiapaneco, la “muerte civil” es considerada como una pena
accesoria a personas involucradas en la reincidencia de la comisión de delitos
por hechos de corrupción.
Plantea la
inhabilitación definitiva para desempeñar empleo, cargo o comisión públicos;
privación a la libertad; y la suspensión de derechos para ejercer profesión,
oficio, licencia o permiso tanto a servidores públicos como a particulares
reincidentes.
“La propuesta es
oportuna y complementaria a las acciones que se han tomado en torno al combate
a la corrupción”, concluyó Zoé Robledo.
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